viernes, 30 de septiembre de 2011

Ese veneno de efecto lento

Las lamentaciones y errores son productos de la memoria.



Ahora, acabo de darme cuenta de que lo más difícil que puede
hacer uno es, darse una segunda oportunidad.
Que debes sacar de ti mismo ese veneno que te tatúa la piel, que te marca,
que te hace odiarte. 





Volver a sentirte, volver a confiar en ti, dejar atrás tus errores,
dejar de arañarte el corazón.  Dejar de dudar de tus posibilidades.



Quítate los zapatos, desnúdate, pisa la arena, corre hacia el mar,
despierta y sigue corriendo. Mírate a un espejo y dime que ves.





Espero poder perdonarme por todo el daño que me he hecho,
espero dejar de culparme por errores imposibles de no cometer,
espero dejar de hacerme sangrar a cada paso en falso. 

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