domingo, 3 de abril de 2011

La vida y sus maravillosas cosas.

Puestos a dejar cosas atrás, acabas queriéndolo dejar absolutamente todo.

"Si Amélie prefería vivir en sus sueños y seguir siendo una chica introvertida, estaba en su derecho, ya que malograr su vida es para todo ser humano un derecho inalienable"

No, idiota. Está enamorada. 
Pero si no la conozco. 
Claro que la conoces. Desde siempre, en tus sueños.
Hoy tengo ganas de hacer  
nada ...





 Un perro que mordía su vida perra. Surcado por unas arrugas que nada decían de su cara salvo para gritar la edad que las había cavado. Tenía una expresión como de hola y adiós, como de un eterno y sencillo mediodía, mermado por un puñado de tiempo. Su frente se extendía hasta el día siguiente de su barbilla donde el cuello se aferraba desesperadamente a unos hombros ventrudos.



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